1 Cuando los reyes de Cisjordania, de la Montaña, de la Sefela y de toda la costa del mar Grande hasta la región del Líbano (hititas, amorreos, cananeos, fereceos, jeveos y jebuseos), se enteraron de esto,
2 se aliaron para hacer frente juntos a Josué y a Israel.
3 Por su parte, los habitantes de Gabaón —que se habían enterado de cómo había tratado Josué a Jericó y a Ay—,
4 recurrieron a la astucia. Se proveyeron, al efecto, de víveres, tomaron alforjas viejas para sus asnos y odres de vino viejos, rotos y recosidos;
5 se pusieron también ropas usadas y sandalias viejas y remendadas. El pan que llevaban para su sustento era todo él seco y desmigajado.
6 Llegaron al campamento de Guilgal, donde se encontraba Josué, y le dijeron a él y a los demás israelitas:— Venimos de un país lejano y queremos hacer un pacto con vosotros.
7 Los israelitas replicaron a aquellos jeveos:— ¿Y si habitáis en nuestro territorio? Porque en tal caso, no podemos hacer un pacto con vosotros.