1 No debéis olvidar, hermanos, que todos nuestros antepasados caminaron al amparo de aquella nube*, y atravesaron el mar.
2 Todos fueron bautizados como seguidores de Moisés cuando aconteció lo de la nube y lo del mar.
3 Todos comieron el mismo alimento espiritual y
4 todos bebieron la misma bebida espiritual, pues bebieron de la roca espiritual que los acompañaba, roca que representaba a Cristo.
5 Y, a pesar de todo, la mayor parte de ellos no agradó a Dios, y fueron por eso aniquilados en el desierto.
6 Todo aquello sucedió para servirnos de ejemplo a nosotros; para que no corramos tras el mal, como ellos corrieron;
7 para que no os deis a la idolatría, como se dieron algunos de ellos, según dice la Escritura: Se sentó el pueblo a comer y a beber, y se levantó luego a divertirse.