3 Que Dios Padre y Jesucristo, el Señor, os concedan gracia y paz.
4 Jesucristo ha entregado su vida por nuestros pecados y nos ha liberado de esta era infestada de maldad, conforme a lo dispuesto por Dios nuestro Padre,
5 a quien pertenece la gloria por siempre. Amén.
6 ¡No salgo de mi asombro*! ¡Hay que ver con qué rapidez habéis desertado de aquel que os llamó mediante la gracia de Cristo y os habéis pasado a otro mensaje!
7 ¿Qué digo otro? Lo que pasa es que algunos os desconciertan intentando deformar el mensaje evangélico de Cristo.
8 Pero sea quien sea —yo mismo o incluso un ángel venido del cielo— el que os anuncie un mensaje diferente del que yo os anuncié*, ¡caiga sobre él la maldición!
9 Os lo dije en otra ocasión y os lo repito ahora: si alguien os anuncia un mensaje distinto al que habéis recibido, ¡caiga sobre él la maldición!