37 Entonces los justos le contestarán: “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento o sediento y te dimos de comer y beber?
38 ¿Cuándo llegaste como un extraño y te recibimos en nuestras casas? ¿Cuándo te vimos sin ropa y te la dimos?
39 ¿Cuándo estuviste enfermo o en la cárcel y fuimos a verte?”.
40 Y el rey les dirá: “Os aseguro que todo lo que hayáis hecho en favor del más pequeño de mis hermanos, a mí me lo habéis hecho”.
41 A los otros, en cambio, dirá: “¡Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles!
42 Porque estuve hambriento, y no me disteis de comer; estuve sediento, y no me disteis de beber;
43 llegué como un extraño, y no me recibisteis en vuestra casa; me visteis sin ropa y no me la disteis; estuve enfermo y en la cárcel, y no me visitasteis”.