37 "Si hay hambre en la tierra, si hay pestilencia, si hay pestes o plagas, langosta o saltamontes, si su enemigo los sitia en la tierra de sus ciudades, cualquier plaga, cualquier enfermedad que haya ,
38 toda oración o toda súplica que sea hecha por cualquier hombre o por todo Tu pueblo Israel, conociendo cada cual la aflicción de su corazón, y extendiendo sus manos hacia esta casa;
39 escucha Tú desde los cielos, el lugar de Tu morada, y perdona, actúa y da a cada uno conforme a todos sus caminos, ya que conoces su corazón, porque sólo Tú conoces el corazón de todos los hijos de los hombres,
40 para que Te teman (reverencien) todos los días que vivan sobre la superficie de la tierra que diste a nuestros padres.
41 "También en cuanto al extranjero que no es de Tu pueblo Israel, cuando venga de una tierra lejana a causa de Tu nombre
42 (porque oirán de Tu gran nombre, de Tu mano poderosa y de Tu brazo extendido); cuando venga a orar a esta casa,
43 escucha Tú desde los cielos, el lugar de Tu morada, y haz conforme a todo lo que el extranjero Te pida. Para que todos los pueblos de la tierra conozcan Tu nombre para que Te teman, como Te teme Tu pueblo Israel, y para que sepan que Tu nombre es invocado sobre esta casa que he edificado.