15 Ahora bien, un día antes de la llegada de Saúl, el SEÑOR había revelado esto a Samuel:
16 "Mañana como a esta hora te enviaré un hombre de la tierra de Benjamín, lo ungirás para que sea príncipe sobre Mi pueblo Israel, y él librará a Mi pueblo del dominio de los Filisteos. Porque Yo he visto la aflicción de Mi pueblo, pues su clamor ha llegado hasta Mí."
17 Cuando Samuel vio a Saúl, el SEÑOR le dijo: "Este es el hombre de quien te hablé. El gobernará a Mi pueblo."
18 Entonces Saúl se acercó a Samuel en medio de la puerta y le dijo: "Le ruego que me enseñe dónde está la casa del vidente."
19 Respondió Samuel a Saúl: "Yo soy el vidente. Sube delante de mí al lugar alto, pues hoy comerás conmigo, y por la mañana te dejaré ir y te declararé todo lo que está en tu corazón.
20 "En cuanto a tus asnas que se perdieron hace tres días, no te preocupes por ellas pues han sido halladas. Y ¿para quién es todo lo deseable en Israel? ¿No es para ti y para toda la casa de tu padre?"
21 Saúl respondió: "¿No soy yo Benjamita, de la más pequeña de las tribus de Israel, y no es mi familia la menos importante de todas las familias de la tribu de Benjamín? ¿Por qué, pues, me habla de esta manera?"