1 Entonces el hombre me hizo volver por el camino de la puerta exterior del santuario que da hacia el oriente, y estaba cerrada.
2 Y el SEÑOR me dijo: "Esta puerta estará cerrada; no se abrirá y nadie entrará por ella, porque el SEÑOR, Dios de Israel, ha entrado por ella; por tanto permanecerá cerrada.
3 "En cuanto al príncipe, él, como príncipe, se sentará allí para comer pan delante del SEÑOR; entrará por el camino del vestíbulo de la puerta y por el mismo camino saldrá."
4 Luego me llevó por el camino de la puerta del norte al frente del templo; miré que la gloria del SEÑOR llenaba la casa del SEÑOR, y me postré sobre mi rostro.