19 Entonces ella se levantó y se fue. Se quitó el velo y se puso sus ropas de viuda.
20 Cuando Judá envió el cabrito por medio de su amigo el Adulamita, para recobrar la prenda de mano de la mujer, no la halló.
21 Y preguntó a los hombres del lugar: "¿Dónde está la ramera que estaba en Enaim, junto al camino?" "Aquí no ha habido ninguna ramera," dijeron ellos.
22 El volvió donde Judá, y le dijo: "No la encontré. Además, los hombres del lugar dijeron: 'Aquí no ha habido ninguna ramera.'"
23 Entonces Judá dijo: "Que se quede con las prendas, para que no seamos causa de burla. Ya ves que envié este cabrito, y tú no la has encontrado."
24 Y a los tres meses, informaron a Judá, diciendo: "Tu nuera Tamar ha fornicado, y ha quedado encinta a causa de las fornicaciones." "Sáquenla y que sea quemada," dijo Judá.
25 Cuando la sacaban, ella envió a decir a su suegro: "Del hombre a quien pertenecen estas cosas estoy encinta." "Le ruego que examine y vea de quién es este sello, este cordón y este báculo," añadió ella.