5 Vienen de una tierra lejana, De los más lejanos horizontes, El SEÑOR y los instrumentos de Su indignación, Para destruir toda la tierra.
6 Giman, porque cerca está el día del SEÑOR; Vendrá como destrucción del Todopoderoso (Shaddai).
7 Por tanto todas las manos se debilitarán, El corazón de todo hombre desfallecerá.
8 Todos se aterrarán; Dolores y angustias se apoderarán de ellos, Como mujer de parto se retorcerán; Se mirarán el uno al otro con asombro, Rostros en llamas serán sus rostros.
9 Miren, el día del SEÑOR viene, Cruel, con furia y ardiente ira, Para convertir en desolación la tierra Y exterminar de ella a sus pecadores.
10 Pues las estrellas del cielo y sus constelaciones No destellarán su luz. Se oscurecerá el sol al salir, Y la luna no irradiará su luz.
11 Castigaré al mundo por su maldad Y a los impíos por su iniquidad. También pondré fin a la arrogancia de los soberbios, Y abatiré el orgullo de los despiadados.