30 "Entonces ésta será la señal para ti, Ezequías: Este año ustedes comerán lo que crezca espontáneamente; el segundo año lo que nazca de por sí, y en el tercer año siembren, sieguen, planten viñas y coman su fruto.
31 "El remanente de la casa de Judá que se salve, echará de nuevo raíces por debajo y dará fruto por arriba.
32 "Porque de Jerusalén saldrá un remanente, y del Monte Sion sobrevivientes. El celo del SEÑOR de los ejércitos hará esto."'"
33 "Por tanto, así dice el SEÑOR acerca del rey de Asiria: 'El no entrará en esta ciudad ni lanzará allí flecha alguna; tampoco vendrá delante de ella con escudo ni levantará terraplén contra ella.
34 'Por el camino que vino, por él se volverá, y no entrará en esta ciudad,' declara el SEÑOR.
35 'Porque defenderé esta ciudad para salvarla por amor a Mí mismo y por amor a Mi siervo David.'"
36 Y salió el ángel del SEÑOR e hirió a 185,000 en el campamento de los Asirios. Cuando los demás se levantaron por la mañana, vieron que todos eran cadáveres.