1 Despierta, despierta, Vístete de tu poder, oh Sion. Vístete de tus ropajes hermosos, Oh Jerusalén, ciudad santa. Porque el incircunciso y el inmundo No volverán a entrar en ti.
2 Sal del polvo, levántate, Cautiva Jerusalén. Líbrate de las cadenas de tu cuello, Cautiva hija de Sion.
3 Porque así dice el SEÑOR: "De balde fueron ustedes vendidos y sin dinero serán redimidos."
4 Porque así dice el Señor DIOS: "Mi pueblo descendió a Egipto al principio para residir allí; después los Asirios los oprimieron sin motivo.
5 "Y ahora, ¿qué hago Yo aquí," declara el SEÑOR "viendo que se llevan a Mi pueblo sin causa?" También declara el SEÑOR: "Sus dominadores dan gritos, y sin cesar Mi nombre es blasfemado todo el día.
6 "Por tanto, Mi pueblo conocerá Mi nombre. Así que en aquel día comprenderán que Yo soy el que dice: 'Aquí estoy.'"