3 Para conceder que a los que lloran en Sion Se les dé diadema en vez de ceniza, Aceite de alegría en vez de luto, Manto de alabanza en vez de espíritu abatido; Para que sean llamados robles de justicia, Plantío del SEÑOR, para que El sea glorificado.
4 Entonces reedificarán las ruinas antiguas, Levantarán los lugares devastados de antaño, Y restaurarán las ciudades arruinadas, Los lugares devastados de muchas generaciones.
5 Se presentarán extraños y apacentarán los rebaños de ustedes, E hijos de extranjeros serán sus labradores y sus viñadores.
6 Y ustedes serán llamados sacerdotes del SEÑOR; Ministros de nuestro Dios se les llamará. Comerán las riquezas de las naciones, Y en su gloria se jactarán.
7 En vez de su vergüenza tendrán doble porción , Y en vez de humillación ellos gritarán de júbilo por su herencia. Por tanto poseerán el doble en su tierra, Y tendrán alegría eterna.
8 Porque Yo, el SEÑOR, amo el derecho, Odio el robo en el holocausto. Fielmente les daré su recompensa, Y haré con ellos un pacto eterno.
9 Entonces su descendencia será conocida entre las naciones, Y sus vástagos en medio de los pueblos. Todos los que los vean los reconocerán, Porque son la simiente que el SEÑOR ha bendecido.