24 Por tanto, los esparciré como paja arrastrada Por el viento del desierto.
25 Esta es tu suerte, la porción que ya he medido para ti," declara el SEÑOR, "porque Me has olvidado, Y has confiado en la mentira.
26 Por lo cual Yo también te levantaré las faldas sobre tu rostro, Para que se vea tu vergüenza.
27 En tus adulterios y en tus relinchos, En la bajeza de tu prostitución Sobre las colinas del campo, He visto tus abominaciones. ¡Ay de ti, Jerusalén! ¿Hasta cuándo seguirás sin purificarte?"