11 Entonces vino el ángel del SEÑOR y se sentó debajo de la encina que estaba en Ofra, la cual pertenecía a Joás de Abiezer. Y su hijo Gedeón estaba sacudiendo el trigo en el lagar, para esconderlo de los Madianitas.
12 Y el ángel del SEÑOR se le apareció, y le dijo: "El SEÑOR está contigo, valiente guerrero."
13 Entonces Gedeón le respondió: "Ah señor mío, si el SEÑOR está con nosotros, ¿por qué nos ha ocurrido todo esto? ¿Y dónde están todas Sus maravillas que nuestros padres nos han contado, diciendo: '¿No nos hizo el SEÑOR subir de Egipto?' Pero ahora el SEÑOR nos ha abandonado, y nos ha entregado en mano de los Madianitas."
14 Y el SEÑOR lo miró, y le dijo: "Ve con esta tu fuerza, y libra a Israel de la mano de los Madianitas. ¿No te he enviado Yo?"
15 "Ah Señor," le respondió Gedeón, "¿cómo libraré a Israel? Mi familia es la más pobre en Manasés, y yo el menor de la casa de mi padre."
16 Pero el SEÑOR le dijo: "Ciertamente Yo estaré contigo, y derrotarás a Madián como a un solo hombre."
17 Y Gedeón Le dijo: "Si he hallado gracia ante Tus ojos, muéstrame una señal de que eres Tú el que hablas conmigo.