19 El hermano ofendido es más difícil de ganar que una ciudad fortificada, Y los pleitos son como cerrojos de fortaleza.
20 Con el fruto de su boca el hombre sacia su vientre, Con el producto de sus labios se saciará.
21 Muerte y vida están en poder de la lengua, Y los que la aman comerán su fruto.
22 El que halla esposa halla algo bueno Y alcanza el favor del SEÑOR.
23 El pobre habla suplicando, Pero el rico responde con dureza.
24 El hombre de muchos amigos se arruina, Pero hay amigo más unido que un hermano.