138 Has ordenado Tus testimonios con justicia, Y con suma fidelidad.
139 Mi celo me ha consumido, Porque mis adversarios han olvidado Tus palabras.
140 Es muy pura Tu palabra, Y Tu siervo la ama.
141 Pequeño soy, y despreciado, Pero no me olvido de Tus preceptos.
142 Tu justicia es justicia eterna, Y Tu ley verdad.
143 Angustia y aflicción han venido sobre mí, Pero Tus mandamientos son mi deleite.
144 Tus testimonios son justos para siempre; Dame entendimiento para que yo viva.