155 Lejos está de los impíos la salvación, Porque no buscan Tus estatutos.
156 Muchas son, oh SEÑOR, Tus misericordias; Vivifícame conforme a Tus ordenanzas.
157 Muchos son mis perseguidores y mis adversarios, Pero yo no me aparto de Tus testimonios.
158 Veo a los malvados y me repugnan, Porque no guardan Tu palabra.
159 Mira cuánto amo Tus preceptos; Vivifícame, SEÑOR, conforme a Tu misericordia.
160 La suma de Tu palabra es verdad, Y eterna cada una de Tus justas ordenanzas.
161 Sin. Príncipes me persiguen sin causa, Pero mi corazón teme Tus palabras.