1 Para el director del coro. Salmo de David. En Ti, oh SEÑOR, me refugio; Jamás sea yo avergonzado; Líbrame en Tu justicia.
2 Inclina a mí Tu oído, rescátame pronto; Sé para mí roca fuerte, Fortaleza para salvarme.
3 Porque Tú eres mi roca y mi fortaleza, Y por amor de Tu nombre me conducirás y me guiarás.
4 Me sacarás de la red que en secreto me han tendido; Porque Tú eres mi refugio.
5 En Tu mano encomiendo mi espíritu; Tú me has redimido, oh SEÑOR, Dios de verdad.
6 Aborrezco a los que confían en ídolos vanos; Pero yo confío en el SEÑOR.