11 Pues nadie puede poner otro fundamento que el que ya está puesto, el cual es Jesucristo.
12 Ahora bien, si sobre este fundamento alguien edifica con oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, paja,
13 la obra de cada uno se hará evidente; porque el día la dará a conocer, pues con fuego será revelada. El fuego mismo probará la calidad de la obra de cada uno.
14 Si permanece la obra de alguien que ha edificado sobre el fundamento, recibirá recompensa.
15 Si la obra de alguien es consumida por el fuego, sufrirá pérdida; sin embargo, él será salvo, aunque así como a través del fuego.
16 ¿No saben que ustedes son templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en ustedes?
17 Si alguno destruye el templo de Dios, Dios lo destruirá a él, porque el templo de Dios es santo, y eso es lo que ustedes son.