9 En esto se manifestó el amor de Dios en nosotros: en que Dios ha enviado a Su Hijo unigénito (único) al mundo para que vivamos por medio de El.
10 En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que El nos amó a nosotros y envió a Su Hijo como propiciación por nuestros pecados.
11 Amados, si Dios así nos amó, también nosotros debemos amarnos unos a otros.
12 A Dios nunca Lo ha visto nadie. Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros y Su amor se perfecciona en nosotros.
13 En esto sabemos que permanecemos en El y El en nosotros: en que nos ha dado de Su Espíritu.
14 Y nosotros hemos visto y damos testimonio de que el Padre envió al Hijo para ser el Salvador del mundo.
15 Todo aquél que confiesa que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él y él en Dios.