8 Pero Elimas, el mago, pues así se traduce su nombre, se les oponía, tratando de desviar de la fe al procónsul.
9 Entonces Saulo, llamado también Pablo, lleno del Espíritu Santo, fijando la mirada en él, dijo:
10 "Tú, hijo del diablo, que estás lleno de todo engaño y fraude, enemigo de toda justicia, ¿no cesarás de torcer los caminos rectos del Señor?
11 "Ahora, la mano del Señor está sobre ti; te quedarás ciego y no verás el sol por algún tiempo." Al instante niebla y oscuridad cayeron sobre él, e iba buscando quien lo guiara de la mano.
12 Entonces el procónsul, cuando vio lo que había sucedido, creyó, maravillado de la doctrina del Señor.
13 Pablo y sus compañeros navegaron desde Pafos y llegaron a Perge de Panfilia; pero Juan se apartó de ellos y regresó a Jerusalén;
14 ellos, saliendo de Perge, llegaron a Antioquía de Pisidia; y en el día de reposo entraron a la sinagoga y se sentaron.