30 Y AMARAS AL SEÑOR TU DIOS CON TODO TU CORAZON, Y CON TODA TU ALMA, Y CON TODA TU MENTE, Y CON TODA TU FUERZA.'
31 "El segundo es éste: 'AMARAS A TU PROJIMO COMO A TI MISMO.' No hay otro mandamiento mayor que éstos."
32 Y el escriba Le dijo: "Muy bien, Maestro; con verdad has dicho que EL ES UNO, Y NO HAY OTRO ADEMAS DE EL;
33 Y QUE AMARLE A EL CON TODO EL CORAZON Y CON TODO EL ENTENDIMIENTO Y CON TODAS LAS FUERZAS, Y AMAR AL PROJIMO COMO A UNO MISMO, es más que todos los holocaustos y los sacrificios."
34 Viendo Jesús que él había respondido sabiamente, le dijo: "No estás lejos del reino de Dios." Y después de eso, nadie se aventuraba a hacer más preguntas.
35 Mientras enseñaba en el templo Jesús decía: "¿Por qué dicen los escribas que el Cristo (el Mesías) es hijo de David?
36 "David mismo dijo por el Espíritu Santo: 'EL SEÑOR DIJO A MI SEÑOR: "SIENTATE A MI DIESTRA, HASTA QUE PONGA A TUS ENEMIGOS DEBAJO DE TUS PIES."'"