10 En el mundo estaba [la Palabra]y, aunque el mundo fue hecho por medio de ella,el mundo no la reconoció.
11 Vino a los suyosy los suyos no la recibieron;
12 pero a cuantos la recibieron y creyeron en ella,les concedió el llegar a ser hijos de Dios.
13 Estos son los que nacen no por generación natural,por impulso pasional o porque el ser humano lo desee,sino que tienen por Padre a Dios.
14 Y la Palabra se encarnóy habitó* entre nosotros;y vimos su gloria, la que le correspondecomo Hijo único del Padre,lleno de gracia y de verdad.
15 Juan dio testimonio de él proclamando: «Este es aquel de quien yo dije: el que viene después de mí es superior a mí porque existía antes que yo».
16 En efecto, de su plenitudtodos hemos recibido bendición tras bendición.