1 Cuando Sambalat, Tobías, los árabes, los amonitas y los de Asdod se enteraron de que se avanzaba en la restauración de las murallas de Jerusalén y de que se iban cerrando las brechas, se enfurecieron
2 y todos a una conspiraron para luchar contra Jerusalén y causarle el mayor daño posible.
3 Así que oramos a nuestro Dios y establecimos contra ellos una guardia de día y de noche.
4 Los de Judá decían:—Empiezan a fallar las fuerzas de los acarreadores y el escombro es mucho. No podremos reconstruir la muralla.Por su parte nuestros enemigos decían: