28 Pero apenas se sentían en paz,otra vez volvían a ofenderte,y otra vez los entregabasen manos de sus enemigosque volvían a oprimirlos.De nuevo clamaban a tiy tú los escuchabas desde el cielo.Así fue como los libraste muchas vecesconforme a tu gran misericordia.
29 No cesabas de amonestarlospara que se convirtieran a tu ley;ellos, sin embargo, fueron soberbiosy no escucharon tus mandatos.Pecaron contra tus normasque dan vida a quien las cumple;rebeldes, te dieron la espalday, tercos, no quisieron escuchar.
30 Los soportaste durante años,tu espíritu los amonestópor medio de tus profetas,pero ellos no quisieron escuchar;por eso los entregastea gentes de [otros] países.
31 Pero en tu gran misericordiano los abandonaste ni aniquilaste,tú que eres un Dios clemente y compasivo.
32 Ahora, pues, Dios nuestro,Dios grande, poderoso y terrible,que eres misericordiosoy te mantienes fiel a la alianza:¡No tengas en poco todo el dolorque sufrieron nuestros reyes,nuestros príncipes y sacerdotes,nuestros profetas y todo tu pueblodesde los tiempos de los reyes asirioshasta el día de hoy!
33 Te has portado justamenteen cuanto nos ha sucedido;tú has actuado rectamente,nosotros hemos sido los perversos.
34 Nuestros reyes y nuestros jefes,nuestros sacerdotes y antepasadosincumplieron tu ley:no atendieron tus mandamientosni las advertencias que les hiciste.