12 Se purificará al tercer día con el agua de purificación, y al séptimo día quedará purificado; pero si no se purifica al tercer día, tampoco quedará purificado al séptimo día.
13 Todo aquel que toque un cadáver, es decir, el cuerpo de una persona que ha muerto, y no se purifique, está profanando la Morada del Señor; tal persona será extirpada de Israel*. Al no haber sido rociada con el agua de purificación, quedará impuro y su impureza permanecerá en él.
14 Este es el ritual a seguir cuando una persona muera en una tienda de campaña: cualquiera que entre en la tienda y todos los que estén en ella quedarán impuros durante siete días;
15 y toda vasija destapada, o cuya tapa no esté bien ajustada, será impura.
16 Asimismo, cualquiera que, en campo abierto, toque a alguien que ha sido asesinado, o que haya muerto de muerte natural, o cualquiera que entre en contacto con huesos humanos o con una sepultura, quedará impuro durante siete días.
17 Para purificar a la persona que haya quedado impura se tomará parte de la ceniza de la víctima quemada en sacrificio y se echará sobre ella agua corriente en una vasija.
18 Una persona purificada tomará hisopo, lo mojará en el agua y rociará la tienda junto con todos los enseres y las personas que estén allí, así como a todo aquel que hubiese entrado en contacto con un asesinado, con huesos de muerto o con una sepultura.