22 No digas: «Me vengaré del mal»;confía en el Señor y él te salvará.
23 El Señor aborrece el doble peso,las balanzas trucadas son ilícitas.
24 El Señor dirige los pasos humanos;¿cómo conocerá una persona su camino?
25 Es peligroso decir a la ligera: «Esto prometo»y después reconsiderar lo prometido.
26 Rey sabio avienta a los malvadosy hace que el trillo los triture.
27 El Señor ha dado al ser humano un espíritucomo luz que sondea lo más profundo de su ser.
28 Amor y verdad protegen al rey;su trono se sostiene en la bondad.