2 Los felicito, porque no hay cosa en la que no me tengan presente y porque conservan las tradiciones tal como se las transmití.
3 Pero quiero que sepan que Cristo es cabeza de todo varón, como el varón lo es de la mujer y Dios lo es de Cristo.
4 Todo varón que ora o comunica mensajes divinos* con la cabeza cubierta, deshonra a Cristo, que es su cabeza.
5 Igualmente, toda mujer que ora o comunica mensajes divinos con la cabeza descubierta, deshonra al marido, que es su cabeza; es como si se la hubiera rapado.
6 Si, pues, no quiere llevar velo, que se corte el pelo a rape. Y si considera vergonzoso para una mujer cortarse el pelo o llevar rapada la cabeza, que use velo.
7 El varón no debe cubrirse la cabeza, por cuanto es imagen y reflejo de la gloria de Dios; pero la mujer refleja la gloria del varón.
8 Pues no procede el varón de la mujer, sino la mujer del varón;