1 En Iconio* acudieron también a la sinagoga judía y hablaron con tal persuasión, que fueron muy numerosos tanto los judíos como los griegos que se convirtieron.
2 Pero los judíos, reacios a dejarse convencer, soliviantaron a los no judíos, tratando de enemistarlos con los hermanos creyentes.
3 No obstante, Pablo y Bernabé permanecieron allí por algún tiempo hablando resueltamente acerca del Señor, quien confirmaba el mensaje de bendición con las señales milagrosas y los prodigios que realizaba por medio de ellos.
4 Así las cosas, se dividió la población en dos bandos: uno era partidario de los judíos; el otro, de los apóstoles.