9 Dios permitió que Daniel se ganara el respeto del jefe del personal.
10 Éste estaba preocupado ante la petición de Daniel. «Mi señor el rey ha ordenado que ustedes coman esta comida y beban este vino, le dijo. Tengo miedo de que se pongan pálidos y delgados en comparación con los otros jóvenes de su edad, y luego el rey me cortaría la cabeza por no cumplir bien con mis responsabilidades».
11 Daniel conversó sobre este asunto con el mayordomo a quien el jefe del personal había encargado el cuidado de Daniel, Ananías, Misael y Azarías.
12 Dijo Daniel: «Haz una prueba con nosotros. Por diez días danos de comer vegetales y de beber sólo agua.
13 Al final de los diez días, compara nuestro aspecto con el de los jóvenes que comen la comida del rey, y entonces decide si nos dejas continuar comiendo vegetales y bebiendo agua».
14 Por fin el mayordomo aceptó que se hiciera la prueba por diez días.
15 Al finalizar los diez días, ¡Daniel y sus tres amigos parecían más saludables y mejor alimentados que los jóvenes que habían estado comiendo de la comida del rey!