4 Pidieron además los nombres de los que estaban trabajando en ello.
5 Pero como Dios protegía a los jefes del pueblo judío, los enemigos les permitieron continuar los trabajos hasta que llegara la respuesta del rey Darío, a quien se le consultaría sobre el asunto.
6 De modo que Tatenay, gobernador de la región al occidente del Éufrates, y Setar Bosnay y sus compañeros, y los demás funcionarios enviaron la siguiente carta al rey Darío:
7 Saludamos al rey Darío, y le deseamos paz.
8 Queremos informarle que fuimos al templo del gran Dios, y descubrimos que está siendo reconstruido con grandes piedras. Además vimos que se están colocando maderas en las murallas de la ciudad. La obra está avanzando con gran rapidez y éxito.
9 Preguntamos a los dirigentes: ¿Quién les dio permiso para hacer esto?
10 Pedimos, además, los nombres a fin de notificárselo a usted.