1 El SEÑOR se le apareció a Abraham junto al bosque de encinas de Mamré. Ese día Abraham estaba sentado a la entrada de su carpa, a la hora más caliente del día.
2 Abraham levantó la mirada y vio que tres hombres se dirigían hacia él. Se levantó de un salto y corrió al encuentro de ellos. Se inclinó hasta tocar el suelo con su frente,
3 y dijo:—Mi señor, le ruego por favor que no pase de largo, sino que se quede aquí un momento.
4 Voy a pedir que les traigan agua para que se laven los pies, y podrán quedarse a descansar bajo la sombra de este árbol.
5 Y ya que han pasado por la carpa de este servidor de ustedes, les voy a traer algo de comer, para que repongan sus fuerzas y puedan continuar su viaje.—Muy bien —dijeron ellos—, aceptamos tu invitación.
6 Entonces Abraham entró corriendo a la carpa y le dijo a Sara:—Toma pronto unos veinte kilos de la mejor harina, amásalos y haz unos panes.