12 lo agarró de la túnica y le ordenó:—¡Acuéstate conmigo!Él salió corriendo, pero ella logró echarle mano del manto y se lo quitó.
13 Cuando ella vio el manto de José en sus manos, y que él había huido,
14-15 comenzó a gritar. Cuando los otros hombres que estaban cerca llegaron corriendo para ver lo que ocurría, ella comenzó a gritar histéricamente.—¡Mi marido tenía que traer a ese esclavo hebreo para que nos insultara! —dijo llorando—. Trató de violarme, pero cuando grité, huyó y olvidó llevarse el manto.
16 Ella guardó el manto, y cuando Potifar regresó a casa esa noche,
17 le dijo:—¡El esclavo hebreo que tienes aquí quiso violarme,
18 y solamente mis gritos me salvaron! ¡Al salir corriendo se le quedó su manto!
19 Cuando Potifar oyó esto, se enfureció.