10 Pero el SEÑOR le dijo:—¿Qué hiciste? Desde la tierra, la sangre de tu hermano me pide justicia.
11 Por eso, quedarás bajo la maldición de la tierra, la cual se ha tragado la sangre de tu hermano, al que tú mataste.
12 Cuando trabajes la tierra, no te dará cosechas. Vivirás en el mundo como un fugitivo, sin poder encontrar descanso.
13 Caín le dijo al SEÑOR:—Ese castigo es más de lo que puedo soportar.
14 Hoy me echas de esta tierra, y tendré que vivir lejos de tu presencia. Tendré que vivir huyendo como un fugitivo, expuesto a que cualquiera que me encuentre me mate.
15 El SEÑOR le contestó:—Eso no sucederá. Si alguien te mata, será castigado siete veces.Luego el SEÑOR le puso una marca a Caín, para que nadie lo matara.
16 Entonces Caín se alejó de la presencia del SEÑOR y fue a vivir en la región de Nod —tierra de los errantes—, al oriente del Edén.