3 En cuanto a mí respecta, tú conoces mi corazón, bien sabes cuánto anhelo serte fiel. ¡Sin embargo, soy pobre, oh SEÑOR! ¡SEÑOR, llévalos arrastrados como ovejas silenciosas al matadero! ¡Júzgalos, oh Dios!
Leer capítulo completo Jeremías 12
Ver Jeremías 12:3 en contexto