22 Su destino se convertirá en símbolo de todo mal, de modo que cuando alguien quiera maldecir a otro le dirá: “¡El SEÑOR permita te acontezca como a Sedequías y a Acab, a quienes el rey de Babilonia quemó vivos!”
Leer capítulo completo Jeremías 29
Ver Jeremías 29:22 en contexto