37 Pero, primero déjame que suba a los montes y llore con mis amigas mi virginidad durante dos meses.
38 —Sí —dijo él—, anda.Y ella lo hizo y lloró su suerte con sus amigas durante dos meses;
39 luego regresó a donde estaba su padre, que hizo lo prometido. Así que ella nunca se casó. Y después llegó a ser una costumbre de Israel
40 que las jóvenes salieran cuatro días cada año a lamentar el destino de la hija de Jefté.