1 Hijo mío no olvides nunca mis enseñanzas. Guarda mis mandamientos en tu corazón,
2 porque ellos te darán una larga vida y te traerán felicidad.
3 No te apartes nunca del amor y la verdad; llévalos atados a tu cuello como si fueran un collar y escríbelos en lo profundo de tu corazón.
4 Entonces contarás con la buena opinión de la gente y del favor de Dios.
5 Confía en el SEÑOR con todo tu corazón, y no confíes en tu propia inteligencia.
6 Busca la voluntad del SEÑOR en todo lo que hagas, y él dirigirá tus caminos.
7 No creas que eres tan sabio como para no tenerle miedo al mal. Honra al SEÑOR y huye del mal,