1 Yo soy libre, soy apóstol, he visto al Señor con mis propios ojos y ustedes son el fruto de mi trabajo en el Señor.
2 Sin embargo, hay quienes dicen que no soy apóstol. Pues si para otros no lo soy, para ustedes sí, porque ustedes son la señal que legitima mi tarea como apóstol en el Señor.
3 Para los que ponen en duda mis legítimos derechos, diré lo siguiente:
4 ¿Tendré o no tendré derecho de recibir comida?
5 ¿No tengo derecho a tener una esposa y llevarla en mis viajes, como hacen los demás apóstoles, los hermanos del Señor y Pedro?
6 ¿O es que los únicos que en la obra de Dios tienen que trabajar por su cuenta para ganarse el sustento somos Bernabé y yo?
7 ¿Qué soldado tiene que sostenerse a sí mismo mientras sirve en el ejército? ¿A qué agricultor se priva del derecho de comer de lo que ha cosechado? ¿A qué pastor de ovejas no se le permite tomar de la leche del rebaño?