7 La bestia también recibió poder para pelear contra el pueblo de Dios y vencerlo, y se le dio autoridad para gobernar a todas las naciones de este mundo.
8 Y la adoraron todos los seres humanos cuyos nombres no estaban inscritos, desde la creación del mundo, en el libro del Cordero que fue sacrificado.e
9 El que tenga oídos, escuche bien:
10 El que deba ir preso, caerá preso; el que deba morir a espada, morirá a filo de espada.Aquí se verá la paciencia y la fidelidad del pueblo santo.
11 A continuación vi que otra bestia surgía de la tierra con dos cuernos semejantes a los de un cordero, pero con una voz como la del dragón.
12 Poseía la misma autoridad de la primera bestia en presencia de ésta, y exigió que el mundo entero adorara a la primera bestia, que había sido sanada.
13 Los milagros que realizaba eran increíbles; podía, por ejemplo, hacer que cayeran del cielo llamaradas de fuego ante los ojos asombrados de la humanidad.