19 —Maestro, Moisés nos enseñó por medio de sus escritos que si un hombre muere y deja a su esposa sin haber tenido hijos, el hermano de ese hombre debe casarse con la viuda para que a su hermano le quede descendencia.
20 Pues bien, había siete hermanos. El primero se casó, pero murió sin dejar hijos.
21 El segundo se casó con la viuda, pero también él murió sin dejar descendencia; lo mismo le pasó al tercero
22 y así sucesivamente a los otros cuatro. Los siete hermanos murieron sin dejar hijos. Después murió también la mujer.
23 Cuando resuciten, ¿de cuál de ellos será esposa esta mujer, pues los siete estuvieron casados con ella?
24 Jesús les respondió:—Ustedes están equivocados por no conocer ni las Escrituras ni el poder de Dios.
25 Cuando resuciten los muertos, no se casarán ni serán entregados en casamiento, porque serán como los ángeles que están en el cielo.