11 Jesús les respondió:—Si en el día de reposo a alguno de ustedes se le cae una oveja en un pozo, ¿la sacará? ¡Por supuesto que sí!
12 Bueno, díganme, ¿no vale mucho más una persona que una oveja? Por lo tanto, no hay nada malo en que uno haga el bien en el día de reposo.
13 Entonces le dijo al hombre:—Extiende la mano.Y al extenderla le quedó tan normal como la otra.
14 Cuando los fariseos salieron de la sinagoga, se reunieron para planear cómo matarían a Jesús.
15 Pero Jesús, que lo sabía, se alejó de allí seguido por mucha gente. Y él sanaba a todos los enfermos,
16 pero les encargaba rigurosamente que no se lo contaran a nadie.
17 Con esto se cumplió la profecía de Isaíasf que anunció: