10 Los discípulos le preguntaron:—¿Por qué los maestros de religión insisten en que Elías regresará antes que aparezca el Mesías?
11 —Ellos tienen razón —les respondió Jesús—. Elías tiene que venir a poner las cosas en orden.
12 Y, en efecto, ya vino, pero en vez de reconocerlo, lo trataron con la misma crueldad con que me tratarán a mí, que soy el Hijo del hombre.
13 Los discípulos comprendieron que se refería a Juan el Bautista.
14 Cuando llegaron al valle, la gente los esperaba; y un hombre corrió y se puso de rodillas ante Jesús.
15 —Señor —dijo—, ten misericordia de mi hijo, que está enfermo de la mente y padece muchísimo. Muchas veces se cae en el fuego o en el agua, con peligro de su vida.
16 Lo traje a tus discípulos; pero no pudieron curarlo.