1 Al ver que la multitud se le acercaba, Jesús subió a un monte.
2 Allí se sentó, y cuando sus discípulos se le acercaron comenzó a enseñarles:
3 «¡Dichosos los que reconocen su pobreza espiritual, porque de ellos es el reino de los cielos!
4 ¡Dichosos los que lloran, porque serán consolados!
5 ¡Dichosos los mansos, porque el mundo entero les pertenecerá!