10 Pusieron su armadura en la casa de sus dioses y clavaron su cabeza en la casa de Dagón.
11 Cuando los de Jabes de Galaad oyeron todo lo que los Filisteos habían hecho a Saúl,
12 se levantaron todos los hombres valientes y se llevaron el cuerpo de Saúl y los cuerpos de sus hijos, los trajeron a Jabes y enterraron sus huesos bajo la encina en Jabes, y ayunaron siete días.
13 Así murió Saúl por la transgresión que cometió contra el Señor por no haber guardado la palabra del Señor, y también porque consultó y pidió consejo a una adivina,
14 y no consultó al Señor. Por tanto, El le quitó la vida y transfirió el reino a David, hijo de Isaí.