14 Porque los Levitas dejaron sus tierras de pastos y sus propiedades y vinieron a Judá y a Jerusalén, pues Jeroboam y sus hijos los habían excluido de servir al Señor como sacerdotes.
15 Y Jeroboam designó sus propios sacerdotes para los lugares altos, para los demonios (ídolos), y para los becerros que él había hecho.
16 Aquéllos de entre todas las tribus de Israel que habían resuelto en su corazón buscar al Señor, Dios de Israel, los siguieron a Jerusalén para sacrificar al Señor, Dios de sus padres.
17 Y fortalecieron el reino de Judá y apoyaron a Roboam, hijo de Salomón, por tres años, pues por tres años anduvieron en el camino de David y de Salomón.
18 Entonces Roboam tomó por mujer a Mahalat, hija de Jerimot, hijo de David y de Abihail, hija de Eliab, hijo de Isaí,
19 y ella le dio hijos: Jeús, Semarías y Zaham.
20 Después de ella tomó a Maaca, hija de Absalón, y ella le dio a Abías, Atai, Ziza y Selomit.