2 Entonces David subió allá, y también sus dos mujeres, Ahinoam la Jezreelita y Abigail, viuda de Nabal, el de Carmel.
3 Y David trajo a los hombres que estaban con él, cada uno con su familia; y habitaron en las ciudades de Hebrón.
4 Los hombres de Judá vinieron y ungieron allí a David como rey sobre la casa de Judá. Y avisaron a David: "Fueron los hombres de Jabes de Galaad los que sepultaron a Saúl."
5 Y David envió mensajeros a los hombres de Jabes de Galaad, a decirles: "Benditos sean del Señor, porque han mostrado esta bondad a Saúl su señor, y lo han sepultado.
6 Ahora, que el Señor les muestre misericordia y verdad; y yo también les haré bien por esto que han hecho.
7 Fortalezcan, pues, sus manos, y sean valientes porque Saúl su señor ha muerto, y la casa de Judá me ha ungido rey sobre ellos."
8 Pero Abner, hijo de Ner, comandante del ejército de Saúl, había tomado a Isboset, hijo de Saúl, y lo llevó a Mahanaim.