6 Por eso, una maldición devora la tierra, y son tenidos por culpables los que habitan en ella. Por eso, son consumidos los habitantes de la tierra, y pocos hombres quedan en ella.
7 El vino nuevo está de duelo, Desfallece la vid, Suspiran todos los de alegre corazón.
8 Cesa el júbilo de los panderos, Se acaba el alboroto de los que se divierten, Cesa el júbilo de la lira.
9 No beben vino con canción. El licor es amargo a los que lo beben.
10 Derribada está la ciudad del caos, Toda casa está cerrada para que no entre nadie.
11 Hay clamor en las calles por falta de vino, Toda alegría se convierte en tinieblas, Desterrado está el júbilo de la tierra.
12 Desolación queda en la ciudad, Y su puerta está hecha pedazos, en ruinas.