1 Cuando Efraín hablaba, reinaba el temor; Se había exaltado a sí mismo en Israel, Pero por causa de Baal pecó y murió.
2 Y ahora continúan pecando: Se hacen imágenes fundidas, ídolos, con su plata, conforme a su pericia, Todo ello obra de artífices. De ellos dicen: "Que los hombres que sacrifican, besen los becerros."
3 Por tanto, serán como niebla de la mañana, Y como rocío que pronto desaparece, Como paja aventada de la era, Y como humo de chimenea.
4 Pero Yo he sido el Señor tu Dios Desde la tierra de Egipto; No reconocerás a otro dios fuera de Mí, Pues no hay más salvador que Yo.