4 Acuérdate de mí, oh Señor, en Tu bondad hacia Tu pueblo; Visítame con Tu salvación,
5 Para que yo vea la prosperidad de Tus escogidos, Para que me regocije en la alegría de Tu nación, Para que me gloríe con Tu heredad.
6 Nosotros hemos pecado como nuestros padres, Hemos hecho iniquidad, nos hemos conducido impíamente.
7 Nuestros padres en Egipto no entendieron Tus maravillas; No se acordaron de Tu infinito amor, Sino que se rebelaron junto al mar, en el Mar Rojo.
8 No obstante, los salvó por amor de Su nombre, Para manifestar Su poder.
9 Reprendió al Mar Rojo, y se secó; Y los condujo por las profundidades, como por un desierto.
10 Los salvó de mano del que los odiaba, Y los redimió de mano del enemigo.